Sunday, December 9, 2007

Con razón ya no me chupo el dedo



Hace ya varios años que me he sentido muy orgullosa de mi misma porque por fín dejé de chuparme el dedo. Sinembargo el sábado por la mañana ese orgullo se convirtió en desesperación.

Ya tenía dos noches sin dormir, porque Aaroncillo estaba un poquito enfermo, así que la noche del viernes caí como piedra en pozo, como dice doña Cuca; o como la burra del lechero despues de hacer su recorrido, como diría doña Lila.

El Nathan se levantó ese dia muy temprano, como de costumbre, porque le tocaba trabajar tiempo extra. Cuando se estaba arreglando oyó que Aaroncillo como que medio se remolieaba, buscando su chupón; como la luz estaba apagada, no lo podía encontrar.

Lo curioso era que al mismo tiempo que se oían los respingos del Aaroncillo se oían tambien unos chupetes.

Intrigado, el Nathan prendió la luz y he aquí lo que se encontró.























Y yo que pensaba que ya se me había quitado la cochina maña.

Bendito!

No comments: